La Dermatitis Digital (DD) es una entidad patológica que fue diagnosticada por primera vez en Italia, por Morterallo en 1974. Esta lesión, al igual que otras, induce a evidentes cojeras en bovinos, con las consecuentes pérdidas por concepto de fertilidad disminuida, menor producción de leche, gastos por tratamientos etc. En esta revisión, se abordarán los aspectos más relevantes de la etiología, epidemiología, pérdidas económicas y productivas, diagnóstico, tratamientos, prevención, control y la situación actual en Chile.

Definición

Se define como una enfermedad aparentemente contagiosa. Aparece como una lesión demarcada, principalmente en los miembros posteriores, que afecta la epidermis de la cara plantar del pie del bovino, entre los talones, aunque puede tener otras ubicaciones menos comunes. Esta dermatitis se caracteriza por ser circunscrita, de tamaño variable y muy dolorosa, la que produce una cojera manifiesta. El animal afectado raramente se recupera en forma espontánea. Ha recibido otros nombres tales como Enfermedad de Mortellaro, Papilomatosis interdigital, Dermatitis Verrucosa, Dermatitis Digital Papilomatosa, 'Footwarts', y en Chile generalmente se le conoce como «Hongo» en términos no científicos.

Agentes causales

A la DD se le ha dado el carácter de infecto-contagiosa producto de como se comporta del punto de vista epidemiológico y por que además, se ha aislado desde las lesiones una bacteria del tipo espiroqueta muy característica.

Dermatitis Crónica

 No obstante, el cuadro no ha podido ser reproducido ex­perimentalmente. Además, han sido aislados otros agentes infecciosos bacterianos tales como Bacteroides spp., Fusobacterium necrophorum, Campylobacter fecalis, Staphylococcus y Streptococcus. Por otro lado, se han asociado como factores predisponentes de la lesión deficiencias nutricionales de Zinc y Manganeso.

Síntomas

Esta lesión se caracteriza por ser una epidermitis superficial, generalmente circular, de carácter sangrante cuando se produce contacto físico con ella. Puede presentar tres estados, una inicial, otra clásica y por último una forma crónica o tardía.

La inicial puede presentar un diámetro menor a la clásica, la cual puede pasar inadvertida y en general no inducir a cojera en forma inmediata. A medida que avanza la lesión incrementa el diámetro, se hace más evidente y es más fácil de traumatizar por lo que induce a una cojera más notoria que la inicial. Si continúa su desarrollo, no incrementa tanto su diámetro pero si cambia el aspecto de la lesión per se , generándose un tejido fibroso, similar a una verruga o papiloma, por lo que de aquí derivan algunos de los nombres con los que se conoce esta enfermedad.

En general, en condiciones de mucho barro, las lesiones se en­mascaran por el material acumulado en la zona, lo que dificulta su diagnóstico.

Una situación interesante de señalar es que debido a la lesión y al dolor manifiesto, el animal tiende a pisar más con la punta de los pies que con toda la superficie plantar. De aquí, ocurre un desgaste mayor de la pezuña en su parte anterior y un sobrecrecimiento de la parte posterior del miembro con lo cual se observa una forma de pezuña más parada debido al mayor ángulo determinado por esta situación.

Diagnóstico

El diagnóstico clínico es fácil si se es meticuloso al llevar a cabo un buen examen de la pezuña. Lo complicado, es que requiere de una excesiva manipulación del animal en un brete, lo que significa mayor tiempo y riesgos de traumas del animal Se debe hacer un diagnóstico diferencial con otras lesiones típicas tales como la Dermatitis Interdigital, Necrobacilosis interdigital, Celulitis séptica del rodete coronario y traumas en general.

Un método de screening, fácil de realizar, rápido, seguro y eficaz es el método del «Chorro de Agua» en la sala de ordeña. Este método fue evaluado por Rodríguez y Meléndez, 1996 (datos no publicados), el que determinó una concordancia de sobre un 80% en relación a una observación clínica meticulosa de cada animal en un brete . Este método consiste en aplicar un chorro de agua a cada uno de los miembros tanto en su parte posterior como anterior durante el ordeño y visualizar la zona de la pezuña con apoyo de luz artificial (linterna).

El diagnóstico histológico es de mayor complicación ya que requiere de una difícil toma de muestra. No obstante, la histopatología determina las alteraciones típicas de la lesión en forma moderada a severa.

Tratamiento

El tratamiento solo ha sido empírico ya que no se han llevado a cabo estudios que demuestren la efectividad de alguno de ellos. En general, en Estados Unidos es muy utilizado tanto un tratamiento individual como de rebaño. En el individual, se utiliza la misma sala de ordeña y se aplican aerosoles de oxitetraciclina al 2% y violeta de genciana al 0,5%. La aplicación parenteral de Ceftiofur también ha sido de rutina. En terapia de rebaño se usan los pediluvios ya sea con formalina al 2% combinado con sulfato de cobre al 5%. Otra alternativa es oxitetraciclina 1 gr/lt/ 3 días, el cual eleva en forma significativa el costo por concepto de tratamiento. Lo interesante es que el uso de pediluvios se ha estado cuestionando mucho últimamente y es más, en algunos estudios se han considerado como factores de riesgo de transmisión de la enfermedad cuando no se utilizan bien.

Epidemiología

Desde que fue descrita por primera vez en Italia, en 1974, la DD ha adquirido una importancia cada vez mayor a nivel mundial como causa de cojera en vacas lecheras. Su incidencia ha ido en aumento en los últimos años, como lo testifican reportes de muchos países, incluyendo la mayor parte de Europa, Estados Unidos, Canadá, y otros países. En algunas áreas, como en el sur de California, Estados Unidos, la DD ha llegado a afectar al 75% de los planteles lecheros y dentro de un rebaño hasta un 90% de los animales. En Chile, se desconoce la prevalencia de la enfermedad, aunque reportes no oficiales de veterinarios del rubro lechero, consideran que es alta.

Dermatitis Aguda

Aún se desconoce información básica sobre aspectos epidemiológicos de la DD, tales como la misma etiología, vía de entrada en los planteles, modo de transmisión entre los animales, etc. Sin embargo, en algunos países se han identificado diversos factores de riesgo de la DD; entre ellos, localidad donde el plantel está ubicado, compra de vaquillas de reemplazo, el estado higiénico de los corrales, etc. Pero es muy probable que estos factores de riesgo varíen en cada país, según las condiciones climáticas, normas de manejo, instalaciones, etc.

Pérdidas productivas

En general, las cojeras determinan una disminución en la producción de leche, una mayor pérdida de peso y una disminución en la fertilidad. Esto principalmente por que la mayor incidencia de los cuadros de cojeras ocurren dentro de los primeros 100 días de lactancia. De este punto de vista, si la DD induce a cojera, las pérdidas productivas en general serán similares a cualquier tipo de claudicación.

Según informes británicos, las cojeras determinaron en 1980 pérdidas del orden de 12 millones de libras esterlinas, dándose una prevalencia de DD del 10%. En otro estudio británico, en 1985 se encontró que la prevalencia de DD fue de 8% y que el lapso parto preñez incrementó en los animales con la lesión en 18 días en relación a un grupo control sano.

Control

El control se ha basado en el tratamiento preventivo de todo el rebaño con el uso de pediluvios, lo que es cuestionable. La segregación de animales enfermos es otro medio de control, pero que adolece de las mismas desventajas cuando uno maneja animales separados o por grupos.

Debido a que uno de los factores de riesgo determinado en los estudios epidemiológicos ha sido la compra de vaquillas o introducción de animales nuevos al rebaño, se hace fundamental el llevar a cabo una cuarentena de todo animal nuevo que ingresa a un plantel, lo que es válido también para otras entidades patológicas. No obstante, lo ideal sería manejar al rebaño en forma cerrada y no permitir la entrada de animales extraños al sistema.

Situación nacional

La DD se conoce desde hace algún tiempo en Chile, no obstante nunca había sido estudiada bajo ningún punto de vista.

Durante fines de 1995 y 1996, nuestra Facultad, fue invitada a participar por la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de California, Davis, California, Estados Unidos, en un estudio para abordar algunos aspectos epidemiológicos de la DD en Chile. Este estudio formó parte de un gran proyecto de investigación de la universidad norteamericana, financiado en gran medida por los productores de leche del estado de Cali­fornia. El investigador principal fue el Dr. David Hird y el principal ejecutor del proyecto tanto en Estados Unidos como en Chile fue el Dr. Alfonso Rodríguez. El Dr. Pedro Meléndez representó a nuestra Facultad.

La idea de este estudio fue conocer la prevalencia de la enfermedad tanto en la X región como en las regiones V, VI y Metropolitana y estimar algunos factores de riesgo. La metodología se basó en una encuesta que abarcó a 300 planteles de leche y una visita al azar de 30 planteles de los 300 y evaluar en la sala de ordeña con el método del chorro de agua la prevalencia de la enfermedad.

En la X región la prevalencia se estimó en aproximadamente un 12% y en la zona central en aproximadamente un 10%. Estos han sido algunos resultados preliminares obtenidos y en este momento se está llevando a cabo la estimación de algunos factores de riesgo.

Un estudio complementario fue la validación del método de diagnóstico del chorro de agua en la sala de ordeña, al cual se le estimo tener una concordancia de sobre el 80% en relación a un examen clínico más riguroso.

Resultados publicados proba­blemente estarán disponibles a mediados de año, los cuales serían el primer estudio científico epide­miológico llevado a cabo en Chile en relación a esta enfermedad.'