Hemos caminado durante más de un año por el fascinante y estimulante camino de este proyecto académico llamado TECNOVET. La Facultad se ha fortalecido Institucionalmente con esta experiencia editorial y se encuentra ansiosa de recibir este cuarto número.

No puedo hacer pasar más líneas sin destacar la generosa comunión de trabajo que se ha establecido entre el grupo encargado de la producción y responsables de la revista y los auspiciadores que creyeron en el proyecto. Ellos y los tantos colaboradores, han logrado encontrar un equilibrio que, como en la naturaleza, se han complementado reconociendo sus roles y aceptandoformas de simbiosis  ygestos de reconocimientos que dinamizan cada día una revista que necesita crecimiento y madurez.

Deberemos seguir optimizando contenidos temáticos, formas y colores, audiencias y mensajes, Tendremos que incorporar al lector de TECNOVET como un protagonista de primera línea en este  proyecto como manera de transformar a TECNOVET en algo que nos pertenezca a los que estamos alrededor de ella.

Decíamos al nacer en una tarde de Marzo, en nuestra Casa Central, que la revista TECNOVET quería ser un medio que permitiera conectar la Facultad con el entorno de las ciencias animales, con las empresas, con los profesionales y técnicosy con la opinion pública. Queríamos también desarrollar mecanismos modernos de escrutinio de la realidad que nos permitiera optimizar nuestra misión institucional, es decir, ser cada día más Servidores de Chile.

Estoy cierto que hemos empezado, y con mucho éxito y fortaleza, a cumplir los objetivos determinados aquella tarde, bajo la mirada ceñera de Bello, Domeyko, Don juvenal y Gómez Millas. Estoy seguro que el compromiso de los auspiciadores que nos han acompañado en esta aventura va mucho más allá del respaldo económico y que abarca los ámbitos del quehacer de la divulgación  como herramienta de progreso. Estamos orgullosos y satisfechos de la dedicación y entrega del equipo que está detrás de la revista , que ha hecho carne un profundo sentido de pertenencia con la Universidad de Chile y su Facultad.

Hemos caminando durante Más de un año por el facinante y estimulante camino de este proyecto académico llamado TECNOVET.

Ha sido un desafío, que por cierto ha valido la pena vivirlo.

Tenemos ya el cuarto número... Llegarán muchos más.